Cuando hablamos de cortinas antibacterianas para uso hospitalario modelo Surchek, estamos ante una alternativa diferente que tiene su principal uso en entornos sanitarios muy controlados. El tejido de estas cortinas está fabricado en TST «tejido sin tejer», que tiene una duración limitada en el tiempo y que sirve para garantizar una asepsia segura entre pacientes.

El proceso de fabricación del TST empieza por los polímeros de resina de polipropileno que se funden en una extrusora, generando fibras cortas y que sometidas a una baja temperatura con la ayuda de un chorro de aire frío van pasando por una banda transportadora, formando una red que posteriormente quedará unida por un proceso denominado unión térmica, dando lugar a un tejido sin tejer de excelentes propiedades mecánicas.

La unión calorífica precisa para completar el proceso de fabricación del no tejido, se realiza mediante una calandra que termo-cohesiona a una temperatura determinada las fibras con unos rodillos termo-soldando bajo unas estrictas condiciones mecánicas y de temperatura, y que confiere al no tejido una perfecta laminación y textura característica comúnmente conocido como gofrado.

Principales características de las cortinas antibacterianas modelo Surchek:

Hipoalergénico, hemorrepelente y atóxico.

Alta resistencia mecánica y química.

Gran suavidad.

Antiestático, eliminando cualquier interferencia con los equipos en quirófano.

Buena maleabilidad.

No se despeluza.

Excelente barrera contra el paso de fluidos y filtración de bacterias.

Gran resistencia al fuego.

Alta opacidad y cobertura.

Gran capacidad de absorción.

A diferencia de la pulverización química, los aditivos activos Surchek están integrados en la estructura de polímero de la tela no tejida en el punto de fabricación.